domingo, 28 de febrero de 2016

WITHOUT THIMBLE: REINA DE CORAZONES (III)


  Y llegó por fin el último post de la Reina de Corazones, ¡bieeeeeen!
  Como os dije, seguramente este sea el que más os interese, porque os puede dar ideas para este u otros disfraces, y porque la parte de costura es muy básica (si sabéis coser un botón, esto no será problema... y si no, ¡siempre queda el pegamento!)


  Para adornar la chaqueta, se dibujan varios corazones en goma eva (los hice en plata porque en blanco me parecía muy soso) y se recortan. Se colocan después sobre las mangas y en la espalda un poco al gusto, y se cosen con unas pocas puntadas (aquí no se ven, pero en la falda las veréis sin problema. 
  Me la probé con la falda (la veréis más adelante, pero aquí ya la tenía terminada) y entonces me di cuenta que aquello no terminaba de encajar, la 'faldilla' la tapaba demasiado. Por eso probé a doblar un poco la parte delantera y entonces sí que me gustó el resultado. La doblez iba enganchada por dentro, pero le puse estos botones de corazón como adorno para darle un poco más de gracia.


  Le puse un lazo al cuello (era en realidad el cinturón de la bata/kimono que tengo para andar por casa) y ya tenía la parte de arriba del look terminada.


  Para la falda usé esta de algodón que compré en algunas rebajas en casa del Tito Amancio. No es que me la ponga mucho, pero me daba pena estropearla, por eso...  


  ...me pareció que hacer unas palas sería lo más adecuado. ¿Recordáis cómo hice el patrón para la falda del vestido de Elsa Fever? ¿No? Pinchad aquí. Pues ahora hacemos los mismo.
  Quería tres palas, una para delante y dos para atrás, así que medí la cinturilla y lo dividí en seis partes; ya tenemos el ancho, a = 11 cm. El largo será el de la falda y el bajo a x 2, es decir 22 cm. Lo dibujamos en el papel, lo recortamos, y ya lo tenemos listo para cortar sobre el fieltro... y entonces me di cuenta de que había olvidado redondear la parte baja; lo hice a ojo con la tijera...


  Le cosemos ahora un zigzag de adorno (¡el mismo que para Alicia!); se coloca procurando que parte de la cinta quede fuera de la pala. Se cosen por último los corazones de fieltro: aproveché los agujeros que ya tenían (originalmente eran para hacer una guirnalda) y dándoles una puntada también en el 'pico' (como he comentado antes, los corazones de la chaqueta los cosí de igual manera).


  Se colocan sobre la falda en el lugar que les corresponde según el cálculo de antes (quedan intercaladas la palas blancas con las rojas de la falda) y se cosen en la parte superior.


  Y ya está, hemos terminado con la falda. El efecto que daban las palas sueltas quedó muy bonito, aunque no evitaron que en una ráfaga de viento se me levantara la falda (qué fresquito sentí de repente..)


  He aquí la que escribe con el look completo; efectivamente he predicado con el ejemplo y me he cortado la cabeza. Tenía dos propósitos para año nuevo: 1) salir en las fotos, 2) salir en las fotos sin hacer el gañan (torcer los ojos, sacar la lengua...) Después de ver las fotos de carnavales voy a añadir una tercera: callarme cuando vayan a sacarme una foto, porque los caretos que luzco luego ¡son traca! Una pena porque me había dibujado un corazón monísimo en los labios.
 Para rematar el disfraz además de la famosísima piruleta, me puse unas medías diferentes: las de rayas que se ven, y unas blancas con picas, treboles... que me regaló mi prima. ¡Oh, qué divina estaba!


  Y para quien no me hiciera caso y pinchara el icono de Facebook, aquí tenéis la foto que colgué, que me encanta. ¡Que les corten la cabeza! No hay nada como que se te ocurra una tontería y que los demás te sigan el juego.
  Bueno, pues ya está, se acabó. ¿De qué tratará el próximo post? No tengo ni idea la verdad.
  Mientras, procurad ser buenos...

  ¡Nos vemos, corazones!
                                                                   M..

lunes, 22 de febrero de 2016

WITHOUT THIMBLE: REINA DE CORAZONES (II)


  Como lo prometido es deuda (bueno, prometer prometer, no prometí nada...), hoy hablamos del forro.


  De las piezas que ya teníamos cortadas, empezaremos con la espalda. Por si no los recordáis, había una costura en el género: la eliminamos para el forro. No hay necesidad de hacer un nuevo patrón, con que dejemos un margen desde la doblez de la tela es suficiente (al centímetro de costura le añadí otro más, de forma que al desdoblar nos quedan 4 cm). Ese margen que hemos dejado, será lo primero que coseremos, unos centímetros por la parte de arriba, y otros por abajo (lo hice a ojo, así que a saber cuantos eran...) Lo que hemos creado con esto es un fuelle que logrará que el forro no tire cuando llevemos la chaqueta puesta.
  Para terminar, se le cose la vista. Tenía recortada ya una en el paño, pero cuando iba a ponerla no me convenció, era demasiado gruesa, así que la cambié por esta que corté de un retal que andaba por allí perdido, sobrante de un vestido que le hice a mi abuela y que algún día os enseñaré (¡poco contenta que va la señora con los vestidos que le hago!)
  Las vistas las remallo y las coloco directamente, pero vosotr@s podéis hacerlo como más os guste... (o sea bien)


  Cosemos los hombros, abrimos costuras, y hacemos lo mismo con los costadillos (por si no os habéis dado cuenta, el montaje del forro es igual que el género)


  Y hacemos lo mismo con el delantero, primero costadillos y hombros después.


  Cosemos la vista delantera que, sujetándola estaba con alfileres cuando me di cuenta de que me había colado: había cosido el hombro antes de tiempo. Pues nada, se coge el descose, se quita el hilo, se coloca bien la vista, se cose otra vez el hombro... ¡y aquí no ha pasado nada!
  No olvidéis coser alrededor para mantenerla fijada al forro (algún día igual os explico cómo se hace el tema de las vistas en realidad... o le pido a Juls que lo haga ella, jeje!)


  Le ponemos la manga como en el género, fruncida en la corona. Cerramos manga y costado, también aquí abrimos costura y nos quemamos un poquito los dedos...


  ...y comenzamos a unir género y forro. Juntamos las boca mangas derecho con derecho y pespunteamos; lo giramos y planchamos (¿veis? esto ya tiene pinta de algo)


  Nos centramos ahora en el contorno, que sujetamos con alfileres y luego cosemos, dejando una abertura para poder dar la vuelta a la prenda (se suele dejar en el forro, pero me despisté, de modo que tuve que hacerla aquí). Las mangas dan un poco el coñazo, están como en medio, por eso si lo preferís podéis hacerlo en dos partes. Respecto al bajo una cosa: oficialmente no se hace así; hay que dejar un margen en el bajo del género que se dobla hacia adentro, el forro mide como 1,5 cm menos y al sujetarlo queda sobrante... (bla, bla, bla, yo prefiero hacerlo a lo bestia) No olvidéis vaciar las costuras, sobre todo allí donde haya ángulos rectos y curvas si queréis que al girar la prenda quede bien.
  Y por fin le damos la vuelta, empezando por la manga y siguiendo con todo lo demás, con cuidado, que si se desgarra el forro queda feo (y os metéis en un buen lío porque, ¡a ver cómo lo apañáis...!
  Qué, la chaqueta ya parece lo que es ¿no? Pues pegarle una buena plancha a las costuras que acabamos de hacer y ¡ya veréis cómo mejora!


  Sujetamos el forro al género por medio de varios puntos en su interior; es decir, metemos la mano por la abertura, cogemos las costuras del paño y del forro, y le damos un par de puntadas en el margen. Repitiendo esto en varios sitios como sisas, hombros, cintura... conseguiremos que el forro no nos baile cuando nos la pongamos.
  Finalizado esto, cerramos la abertura a mano, un poco de plancha y listo.


  Y llegamos a la parte que más pereza me ha dado siempre: los ojales. De hecho, si no recuerdo mal, me hice la loca y me puse con el disfraz del Bicho (sí, uno de los líos en los que me metí)
  Pero como ninguna hada de la costura vino a socorrerme, no me quedó más remedio que hacerlos (no sé por qué me quejo tanto, si los hago con la máquina... ¡Benditas las costureras que los han cosido a mano toda la vida! Mi abuela, por ejemplo...)
  Una cosa fundamental antes de meterse en faena es haber elegido los botones, ya que el largo del ojal dependerá de estos; no me gustan excesivamente grandes, así que al ancho del botón le añado 0,5 cm y listo. Tenéis que saber también cómo irán colocados, para definir la distancia que habrá entre unos y otros. ¿Lo tenéis? Pues marcarlo con la tiza sobre la chaqueta (recordad que para la mujer derecho cruza sobre izquierdo) y a la máquina.
  Cuando estén todos, se coge el descose y a abrirlos uno por uno, con cuidado otra vez, que se puede liar una muy goooordaaaa... Cosemos los botones en el otro lado y...


  ...¡tenemos la chaqueta terminada! Qué requeteguays quedó... y qué cómoda es además. Lleva en realidad un adorno en la parte trasera, pero no se la puse porque me molestaba para la deco de carnaval, pero que cualquier día de estos se lo coloco.

  Pues eso, la confección de la chaqueta como tal ha terminado, en el próximo post os explicaré qué fue lo que le hice para que fuera un poco más Reina de Corazones.

  ¡Nos vemos!
                                                                          M..

miércoles, 17 de febrero de 2016

WITHOUT THIMBLE: REINA DE CORAZONES (I)


  Llega ya la Reina de Corazones... ¡y su piruletón! Fue verla en la tienda de chuches por la que paso al ir a zumba y pensar 'la necesito para carnaval'; porque si me gustaba a mí, estaba claro que a la Princesa le iba a encantar también (ya os comenté que al final la llevaba ella, aunque sin el plástico, que parece que le molestaba para ver las piruletas que había dentro...) Por cierto señores de Fiesta, el Kojak gigante también me gusta, por si me lo quieren regalar, digo...

  Pensando en el disfraz, tenía claro que de negro no iba a ir, no tengo el ánimo para vestirme de cucaracha, es por eso que no se parece en nada a la reina de Disney ni a la de Tim Burton (y eso que me encanta). Tampoco me apetecía hacer algo que terminaría después guardado en una caja (de pequeña me pasaba el día disfrazada en casa, pero ahora como que ya no me da por ahí...), así que decidí que me haría una chaqueta para usar de continuo, la cual decoraría para carnaval. Tampoco la falda la hice, aproveché una que tenía en casa, pero de esto ya os hablaré más adelante porque, la chaqueta en sí lleva tanto trabajo, que voy a repartirlo en tres post (probablemente el más interesante para la mayoría sea el último, pero os lo voy a contar todo igualmente, ¡soy así de malvada!)


  Pensaba en un paño para confeccionar la chaqueta, para que diera calorcito, y encontré este con buen cuerpo, un color precioso y que además estaba rebajado (¡yupiiii!) Cierto es que se mataba un poco con el color de la falda pero, ¡era carnaval!
  Usé el patrón de una americana que me hice para la boda de mi prima hace ya un porrón de años, claro que tuve que ensancharla un poco: aquella la hice entallada, para llevar sobre un vestido de hombros descubiertos (lo de palabra de honor me mata, además que llevaba un tirante cruzado...) y que cuando quiero usarla, ponerme más que una camiseta es cosa de alto riesgo.
  Así pues, les di unos centímetros al delantero, la espalda y la manga, dibujé un patrón para el cuello bebé, Peter Pan o como prefiráis llamarlo, y manos a la obra que me puse.
  Lo primero como siempre: fijar los patrones sobre la tela y cortar. Por cierto, por si alguien se lo pregunta, corto directamente porque mis patrones llevan incorporado ya el margen de costura (¡es que lo de la tiza me parece un coñazo!)


  Empezamos el montaje por los costadillos, del delantero y de la espalda, cosiendo y abriendo costuras con la plancha a continuación. Cosemos después el Centro Espalda, abriendo costuras también (estaba creativa y le di un pespunte de adorno en varios sitios, pero necesario tampoco es que fuera...)


  Seguimos con los hombros, haciendo lo mismos que con los anteriores.


  Colocamos ahora la 'faldilla' de la chaqueta tanto en el delantero como en la espalda (perdón por las maravillosas fotos, pero es que la luz artificial, el rojo y mi cámara no se llevan bien)


  Y cosemos la manga, frunciéndola en la corona (la verdad es que me encantó el resultado, tanto, que se me olvidó poner la hombrera que pensaba)


  Cortamos las piezas del forro, principalmente porque necesitamos ya aquellas que formen parte de los componentes, es decir: el cuello y los puños.


  Hacemos primero los puños, aunque el orden de los factores no alteran el producto... Juntamos derecho con derecho, cosemos alrededor (salvo la parte que se coserá a la manga), planchamos, vaciamos, giramos, planchamos y costura al canto. ¿Fácil, eh? Pues se hace exactamente lo mismo con el cuello.


  Cosemos el cuello al escote, sin olvidar que comenzamos allí donde está el Centro Delantero. Colocamos a continuación los puños.


  Cerramos ahora el costado y la manga de continuo (queda más bonito cerrar el cuerpo por un lado y la manga por otro y unirlos después por la sisa, pero también es más laborioso...) Se plancha abriendo costuras una vez más (os quemareis los dedos, aviso), y con esto hemos terminado la primera parte de la chaqueta. Así contado, parece que es cosa simple, pero os aseguro que sus buenas horitas lleva.
  
  ¿Qué os parece de momento?
  Nos vemos en el próximo post con el forro.
                                                                       M..



lunes, 8 de febrero de 2016

WITHOUT THIMBLE: ALICE IN WONDERLAND (II)


  Buenas, he vueltoooo. ¿Qué tal han ido los carnavales? Por aquí de lujo: temperatura agradable, ¡y sin lluvia! (bueno, vale, un poco sí, pero nada comparado con los diluvios de los últimos años...)
  Pues eso, aunque los días de disfrazarse hayan pasado, yo seguiré hablando de los trajes, que no es por nada, pero nos quedaron de lujo; los míos, y los de mi prima (si no habéis visto la foto de Facebook, ¡pinchar el icono a la de ya!)

  Seguimos hoy hablando de Alicia pues, o de su delantal más bien:


  Iba a hacerlo sobre la marcha en un principio, pero terminé haciendo el patrón de la parte de arriba; es fácil, se copia el patrón del delantero del vestido y se adapta al gusto. Lo que sí calculé a ojo fue el largo del tirante y del 'lazo' de la cintura; en casos así, que son simples rectángulos, tirar siempre a largo, porque si te pasas se corta ¡y listo!; de lo contrario tienes que tirar de empalmes y no siempre queda bien... (yo tuve suerte y los clavé, ¡qué buena soy!)
  Colocamos los patrones sobre la tela y cortamos dos piezas de cada, uno para cada lado, salvo el delantero, donde una de las partes hará de 'forro' (a ver, que necesario en sí no es, pero le da más consistencia...)


  Empezamos por el volante de la corona del cual, así por comentar, no tenía patrón porque dije 'voy a probar con el tirante, a ver si suena la flauta...' Y bien que sonó, porque ¡quedó de lujo! (y a cortar otros dos tirantes que, ¡a ver cómo apañaba aquello sin ellos!)
  Doblamos los extremos más cortos, pespunteamos, planchamos, vaciamos y giramos. Volvemos a planchar y pespunteamos la abertura, para tenerlo controlado más que nada. 
  Lo colocamos sobre uno de los delanteros, donde lo vamos frunciendo un poco al gusto (lo hago con alfileres porque me he hecho un poco vaga, pero que en la escuela lo hacíamos sin nada, a lo loco; y así descosíamos de bien después... Juls puede dar fe de ello. Pero si os apetecen emociones fuertes, ¡es todo vuestro!) Pespunteamos, y planchamos, sin aplastar los frunces a poder ser, ¡que fue lo que hice yo por tener la cabeza en las nubes!
  ¿Lo tenéis? Pues hacedlo igual en el otro lado.


  Vamos a 'forrarlo': colocamos derecho con derecho y cosemos el escote. Planchamos, vaciamos, giramos, pespunte al canto y plancha otra vez. Hacemos ahora lo mismo con los laterales, pero sin pespunte al canto, que no hace falta.


  Le colocamos a continuación un zigzag de adorno, a la distancia del margen que más os guste.


  Le colocamos la cinturilla, la de la parte delantera, haciendo coincidir los centros. Pespunteamos, planchamos, giramos la prenda, y le colocamos la otra cinturilla, que también pespuntearemos.


  Nos ponemos ahora con los tirantes y los 'lazos'; pueden hacerse en doble también, pero bueno, yo opté por lo más sencillo. Se remallan los extremos y luego se planchan a cm.
  Colocamos primero los tirantes: juntamos derecho con derecho y pespunteamos. Pasamos ahora el cm sobrante sobre la costura, y le damos a todo un pespunte de adorno; ¿veis lo bien que queda?
  Lo único que nos queda por hacer son los pasadores (los llamo así pero probablemente tengan otro nombre); le probé el delantal a la Princesa antes de coserlos, y los hice tal cual los marqué en la prueba, doblando primero 1 cm, y lo que corresponda después.


  Es el turno de los lazos: doblamos y redoblamos los extremos que se van a ver, y le damos ahora un pespunte de adorno a todo alrededor. Cogemos el otro extremo, lo colocamos sobre la cinturilla delantera, le pasamos la del 'forro' por encima y cosemos. Vaciamos, giramos y plancha.


  La parte de abajo del delantal sí que se puede hacer a ojo, ya veis, es un simple cuadrado. Remallamos y planchamos a cm (creo que era más, pero no me acuerdo...) Le colocamos el zigzag encima procurando que las esquinas queden monas, y cosemos (guardando la misma distancia desde el margen que en la parte superior quedará muuuuucho mejor)


  Lo sujetamos a la cinturilla delantera, juntando centros y controlando que el ancho final sea el mismo que el de la parte de arriba. Y ahora, pues a la libre elección de cada uno: en mi caso, probé con varias opciones, frunciendo, dos tablas grandes, varias tablas pequeñas... y al final me decanté por esas tablas que veis en la imagen; pero ya os digo que lo mejor es probar. 
  Cuando lo tengáis decidido, se cose, se plancha y...


  ...cosemos la parte baja de la cinturilla. Mirando la imagen igual parece complicado, pero nada de eso, se trata de juntar derecho con derecho y coser hasta donde se pueda, sin pillar en el camino ni la parte de arriba ni la de abajo. Cuando lo giremos una vez terminado, veremos que nos queda un agujero: se plancha bien la cinturilla y se cose luego a mano.
  Cruzamos los tirantes, pasamos los lazos por el pasador correspondiente y...


  ¡Delantal terminado!


  Como ya habéis visto en otras imágenes, le coloqué un corazón rojo para darle un poco más de gracia al look...


  ... que no es por nada, ¡pero quedó precioso! Visto el resultado, acerté al cambiar el primer azul pálido que elegí (el que usé para Cenicienta) por este más intenso.


  Y para terminar, he aquí mi Princesa Alicia, temerosa ante mi orden '¡Que le corten la cabeza!'
  Temerosa... ¡Ja! Se partía de risa cada vez que le apuntaba con la piruleta (que ocurrencia más deliciosa tuve, ¿eh?) Le recordé varias veces que era la villana y que me tenía que tener miedo, pero nada, como quien oye llover... e incluso tuvo la osadía de ¡robarme el caramelo!
  Bromas aparte, estaba guapísima con el disfraz de Alicia en el País de las Maravillas, y con los zapatitos de tacón que le compró su abuela para la ocasión; llevaba también una falda de tul que le regaló mi madre. 
  ¿No os parece que está preciosa?

  Bueno, pues, primer disfraz terminado.
  Nos vemos pronto con la Reina de Corazones.
                                                                           M..

martes, 2 de febrero de 2016

WITHOUT THIMBLE: ALICE IN WONDERLAND (I)


  Carnaval, carnaval... ¡Que ya está aquí! No sé a vosotr@s, pero a mi me ha pillado despistada. No había terminado el día de San Sebastián cuando mis primas me comentaron si tenía pensado algo para carnaval; '¿qué? pero si queda mucho tiempo...' ¡Ja! ¡15 días!!! Y todavía me tenía que poner el traje de aguadora una vez más para la concentración de tamborradas que se había organizado para dar la bienvenida al año cultural; esto quedó muy bien, lo de la noche mejor no lo comento que me enciendo...
  Así que en cuanto guardé el barril, hicimos consejo de brujas... digo de primas, para pensar en disfraces. Aunque poco nos costó, porque la Princesa lo tenía claro: ¡yo voy de Alicia en el País de las Maravillas! ¡Toma ya, como para llevarle la contraria! Pues eso, las demás nos repartimos el resto de personajes: tenemos una Sombrerero Loco, una Conejo Blanco... y una Reina de Corazones, o sea ¡yo!
  Por la falta de tiempo, nos repartimos el trabajo, de forma que solo me iba a encargar de los trajes de Alicia y la Reina (luego por el camino me he echado más trabajo encima... ¡no tengo solución!) El primero que he acabado ha sido el de Alicia, y os lo enseño porque la enana ya lo ha visto, si no nada.


  Para el vestido compré un martelé azul (por fin me he aprendido el nombre de este tejido que suelo llamar terciopelo raro...) y para el delantal, tela de algodón; un zigzag negro para decorar, hilos y ya tenemos el material. Por cierto, os habréis dado cuenta de que casi siempre uso martelé para los vestidos de la Princesa: la razón es que tiene muy buen envejecer, es cómodo, y no hay problema para lavarlo (mis primas los meten incluso en la secadora, así que imaginaos...)
  Tuve que adaptar los patrones, porque la criatura ha crecido desde verano, pero no es complicado, se coge la base, se le hacen un par de cambios, et voilà! (bueno, el cuello sí que tuve que patronarlo...)


  Tenía patrones para el cuerpo y para el cuello, pero no para la falda, porque iba a cortarla directamente sobre la tela; el ancho sería el del tejido, y el largo se obtiene de la siguiente suma: se calcula el largo final que queremos, más 1 cm para la cintura, más lo que queramos para el bajo (4 cm, por ejemplo), y ya tenemos la medida. 


  Lo primero que hay que montar es el cuello, para tenerlo listo para cuando lo necesitemos. Se coloca derecho con derecho y se cose alrededor. Se plancha, se vacía la costura, se gira y le hacemos una costura al canto; volvemos a planchar, y lo reservamos.


  Montamos ahora los hombros: remallamos los extremos, juntamos derecho con derecho y cosemos después; planchamos abriendo costura y ya los tenemos.


  Le cosemos ahora el cuello (¿veis como convenía tenerlo preparado?), se coloca sobre el escote (ojo, la costura al canto quedará abajo) y pespunteamos... y aquí me di cuenta de que era necesaria una vista, para que quedase más limpio. Así que patrón rápido, se corta sobre la tela, se cose, se remalla, y al escote, justo encima del cuello. Cosemos, vaciamos, pespunte al canto y le damos la vuelta. Y en este momento me di cuenta...


  ... ¡las mangas! Me había olvidado de ellas... Mirando la tela que me quedaba, me di cuenta de que no tenía suficiente para las de tipo farol que quería, y como no me apetecía darme otra vuelta para comprar tela (por la pérdida de tiempo principalmente), opté por las que hice para el vestido de Cenicienta (y de Anna también)
  Se remalla y se plancha el bajo a cm y pespunte de adorno. La cosemos ahora a la sisa, frunciéndola en la corona, o haciendo un pliegue, como más os guste, y se vuelve a remallar. Por último le di un pespunte de adorno, que por cierto, también hice en el escote, pero bueno, que necesario tampoco era...


  Cerramos costados y planchamos abriendo costuras; y finalmente, remallamos la espalda y planchamos el cruce. Hala, ya tenemos el cuerpo listo.


  Es el turno de añadirle la falda, que se coloca frunciéndola (no olvidéis remallar los extremos); podría hacerse también con tablas si os gusta... Se cose al cuerpo y se remalla.


  Como cierre elegí otra vez velcro, aunque no es algo que me guste especialmente, prefiero las cremalleras, pero parece que a la Princesa le resulta más cómodo... Procurad que sea más largo que el cuerpo, entrando un poco en la falda, para que sea más fácil de vestir.


  Es el turno de cerrar la espalda. Al estar el cruce, no podemos llegar hasta arriba, así que podéis dejar el agujero (la verdad es que apenas se ve) o podéis cerrarlo siguiendo la línea de plancha (la de la 5ª imagen, aunque no sé si se aprecia algo...)


  Venga, último paso: el bajo. Se puede hacer en plan sencillo, remallar, planchar y coser, o como de costumbre, doblar, redoblar, planchar y coser (en cualquier caso, con un pespunte de adorno queda más mono, así por comentar...)


  Y ya está, ¡vestido terminado!
  Como veis mucha complicación no tiene, y la gracia se la da el delantal... que veréis en el próximo post, que aquí servidora se tiene que poner a coser para terminar todos los líos en los que se mete.
  Disfrutad mientras del detalle del corazón que coloqué en el delantal, para darle un poco más de color al look.


  ¡Nos vemos!
M..